«Esperaba al [ascensor], llovía». De repente, aparece mi vecina con una señora. Pregunté: «¿Le ayuda usted en casa?». A lo que respondió mi vecina: «No, me da miedo dormir sola». Cuando salí a la calle, las primeras gotas de lluvia dilucidaron la conversación: «No tiene miedo a dormir sola, tiene miedo de morir sola».
tiene miedo a morir por estar sola
ResponderEliminar